Que el meu jui siga certer, per a que les meues decissions siguen justes: fermes, pero sense violencia; prudents, pero sense debilitat.
Los miembros del Colectiu Signes asistimos el pasado domingo a la protesta contra la presencia del radical Laporta y la presentación de su partido pseudofascista en Valencia que convocaron Coalicio Valenciana y Grup d´Accio Valencianista. Algo lógico y razonable, como valencianos, valencianistas, defensores de los preceptos constitucionales y enemigos morales del separatismo, el prototerrorismo y la balcanización de España.
Desde nuestra web queremos denunciar la vileza de todos los medios de comunicación que, bien por sensacionalismo, bien por colaboracionismo, han difamado en sus titulares incluyendo falsamente la palabra "agresión" y tildando a los manifestantes y opositores que nos congregamos en esa protesta de "ultraderechistas" y "radicales violentos".
Los hechos son otros muy distintos, a pesar de las manipulaciones mediáticas. Y aunque no consideremos necesario "lavarnos la cara", pues nos ratificamos en la legitimidad de nuestra protesta, sí debemos puntualizar ciertos aspectos:
1. La increpación y el grito de protesta no pueden ni deben ser nunca interpretados como "agresión". Hace falta ser muy retorcido o estar muy al servicio del catalanismo para manipular de ese modo la realidad e informar de forma tan sesgada, parcial, tergiversadora y criminalizadora de estos hechos.
2. El valencianismo condena por sistema la violencia y el terrorismo. No creemos que la mayoría de simpatizantes del sr. Laporta y su organización puedan decir lo mismo tan a boca llena como lo decimos nosotros. Por eso, nosotros acompañaremos a Voces Contra el Terrorismo el día 5 en Madrid, junto a CV, y ellos no. Y por eso en la filas del partido del sr. Laporta se pueden encontrar nombres de conocidos terroristas de Terra Lliure, la ETA catalana.
3. Las libertades de los demás empiezan donde termina la nuestra. Pero consideramos que la propagación de un mensaje político que viene a imponer surrealismos sociales, políticos, históricos, científicos, culturales o territoriales diferentes de las realidades subyacentes en la memoria colectiva valenciana es, cuanto menos, una violación de las libertades ciudadanas de cualquier valenciano y de cualquier español. Y ello merece, cuanto menos, una respuesta cívica firme y contundente.
4. Y merecería el apoyo mediático de todos aquellos que sacan pecho a la hora de cacarear su apego a los valores constitucionales, su valencianía, su españolidad y sus convicciones democráticas. ¿O es que el valencianismo político es tan molesto para esos supuestos "demócratas" que debe ser denostado, ninguneado y finalmente eliminado para poder seguir usurpando de modo hipócrita, falsario y superficial nuestro discurso valencianista?
Colectiu Signes se posicionará siempre del lado del valencianismo político y de la legítima defensa de las libertades de los valencianos, de nuestras señas de identidad y de los principios constitucionales y estatutarios que rigen nuestra convivencia.
Que el meu jui siga certer, per a que les meues decissions siguen justes: fermes, pero sense violencia; prudents, pero sense debilitat.
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